¿Qué hace un Voluntas Dei, en estas circunstancias?

Queridos hermanos y hermanas dejamos la carta de nuestro director de distrito en formación de Chile Reverendo padre Manuel Cornejo, referente al acontecer nacional de estas ultimas semanas.

Mis queridos hermanos Voluntas Dei:

Una de nuestras características de nuestro Padre Fundador es vivir el momento presente. Hoy vemos con tristeza el desmán que se ha originado en nuestro país y no debemos estar ajenos a esas circunstancias.

Vivir el momento presente nos significa saber discernir los signos de los tiempos a la luz de la fe, de la Palabra de Dios, para hacer su voluntad. Nuestros textos de hoy en la liturgia de la Palabra nos muestra a Moisés anclado en la fidelidad y la confianza en Dios para alcanzar sus designios. La Oración es su arma, que contiene y sabe esperar la derrota de los amoabitas, guerreros, fuertes, imbatibles. Pero la confianza en Dios en saber esperar la grandeza de alcanzar sus designios.

En nuestras vidas personales, muchas veces vemos que nuestros esfuerzos no logran los resultados que esperamos, nos viene el abatimiento, la desesperanza y sobre todo, la desconfianza, en sí mismos y en Dios. Si esto lo llevamos al mundo colectivo, vemos una sociedad que también se ve abatida, nublada, que por años busca el bienestar y el bien común de todos. Se pide mayor igualdad, equidad, en todas las circunstancias. Nuestros sistemas por más de treinta años no logran estos estos resultados requeridos. Hoy vemos estos resultados por las pantallas de nuestros televisores, que nos horrorizan y crean el caos y los miedos.

¿Qué hace un Voluntas Dei, en estas circunstancias?. En primer lugar demostrar nuestro profetismo que nos fue dado en nuestro bautismo. Debemos reconocer nuestros errores personales y sociales, con ello promulgar la esperanza contra toda espera. Esperamos al Señor que venga. Hoy Jesús concluye su parábola diciéndonos. ¿Cuando venga el Hijo del hombre encontrará fe en la tierra?. Es una sentencia fuerte, que nos debe animar e impulsar para mirar nuestro acontecer. Dios que nos llama a vivir en la gratuidad con él y los demás hoy nos dice que debemos orar insistentemente, que esa será el arma, para que haya justicia y bienestar, como la mujer viuda que sacó hasta el cansancio al juez que no teme ni a Dios ni a los hombres.

Les animo a que mantengamos el ardor de nuestra consagración en estas circunstancias difíciles de nuestro país. Que construyamos la paz en Jesucristo, que nos confiemos a él, que desde que ve el caos en su corazón quiere hacer nuevas todas las cosas. Él que ve las necesidades de sus hijos nos dará lo que requerimos.

Hagamos vivo el Evangelio con nuestro actuar y decir, para que sea creíble, para hacer que animemos a la confianza en la esperanza de sabernos hijo de Dios que vela por esta patria hermosa que nos dio para nacer en ella, crecer, desarrollarnos, hacerla fructífera a sus ojos con nuestros dones recibidos.

Hagamos que nuestra oración sea escuchada, para que haya una vuelta a la calma, disfrutemos de la paz que Dios nos ofrece. Para que haya igualdad en todos nuestros sistemas sociales, la educación vulnerada, nuestros sistemas de salud quebrados, nuestros hermanos jubilados, que con tanto esfuerzo levantaron lo que pudieron y que hoy reciben jubilaciones de miseria. Que se termine el caos en nuestra calles, que no haya saqueos a quienes con esfuerzos levantaron sus negocios, que la vida sonría y que seamos un pueblo feliz.

Que nuestra madre santísima que vela con su manto de bondad, a quien se le entregó nuestra patria, nos proteja y nos lleve siempre a mirar la vida con los ojos de su Hijo, que por hacer el bien, entregó su vida por todos.

Unidos en la oración, les abrazo.

P. Manuel Cornejo Gárate i.v.Dei

Director Distrito en Formación de Chile